La Junta de Castilla y León anunció hace escasos días la creación de un convenio con el Centro Documental de la Memoria Histórica para elaborar un censo de víctimas de la Dictadura Franquista en la Comunidad; con el objetivo de buscar y exhumar los cuerpos y entregarlos a los familiares.
Se prevé que este mes salga en el BOCYL una convocatoria con una dotación económica de 100.000€ para desarrollar esta actividad.
La AMRH (Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica ) en un comunicado a Europapress ha criticado la medida y su encargo al CDMH en base a que:
"la mayoría de los asesinatos de las personas exhumadas fueron extrajudiciales y no dejaron rastro documental"
¿Qué os parece desde un punto de vista documental la medida que pretende llevar a cabo la Junta? ¿Esperáis un paso en esta línea de otras comunidades?
Me pregunto muchas veces si no habría que fijarse en proyectos desarrollados con éxito. En este caso creo que el proyecto del Archivo de la Isla de Ellis (The Statue of Liberty - Ellis Island Foundation, Inc.) que contiene los datos de más de 51 millores de pasajeros, inmigrantes y tripulación llegados a Estados Unidos entre 1892 y 1957 a través de la Isla de Ellis y el Puerto de Nueva York, podría servir de ejemplo de desarrollo:
El registro de pasajeros contenía 11 datos que permiten buscar por nombre, apellido, fecha de llegada, embarcación, edad del pasajero, etc. Que sepa, este proyecto lleva online al menos 10 años.
Sin ánimo de generar excesivo debate, tal vez se puedan malinterpretar los titulares de ambas noticias.
La ARMH tiene razón al decir que los “paseos” que se produjeron durante la Guerra Civil carecen de rastro documental, y ese es uno de los graves problemas que se plantean en las investigaciones para localizar las fosas e identificar a las personas que se encuentran en ellas.
Y en el CDMH no se va a localizar demasiada información sobre ese tipo de represalias. Allí, lo que se puede encontrar es precisamente el rastro documental que sí dejaron los procesos judiciales contra los represaliados (como también ocurre, por cierto en el Archivo de la Real Chancillería de Valladolid, donde se conserva la documentación del Tribunal Regional de Responsabilidades Políticas que se asentó en Valladolid).
Aún así, si lo que se quiere es elaborar un censo de víctimas del Franquismo, tal vez sea bueno recordar que eso ya se hizo. Y no sólo una vez, sino en dos ocasiones:
Por un lado, está el Portal de Víctimas de la Guerra Civil y Represaliados del Franquismo, donde se puede consultar una base de datos de evidencias documentales sobre personas represaliadas durante y después de la Guerra Civil con información extraída de seis archivos (entre ellos, el propio CDMH y Chancillería de Valladolid)
Y por otro lado, está el Mapa de Fosas, que es un registro topográfico de las fosas y de quienes fueron enterrados en ellas, sobre las que no existe evidencia documental directa pero hay constancia de algún tipo.
Ambos proyectos fueron desarrollados sobre todo el territorio español en aplicación de la Ley 52/2007 de Memoria Histórica y creo que son una buena herramienta para empezar a elaborar un “tercer censo” de víctimas, esta vez de víctimas castellano y leonesas, supongo.
Aunque quizá, en vez de volver a censar a las víctimas, sería buena idea fomentar la exhumación de la fosas localizadas, promover la investigación sobre las fosas que quedan por localizar, reconocer a las familias el daño ocasionado y dejar de tomar medidas que en vez de efectivas, parecen simplemente un lavado de imagen ante la opinión pública.
